Descripción
El café de Sumatra, Indonesia tiene un sabor único. Destaca entre los cafés de especialidad manteniendo la tradición y lo salvaje de su grano. El resultado es un café complejo con sutil acidez y aroma delicioso.
ORANG UTAN
POR QUÉ ESTE CAFÉ DE SUMATRA SE LLAMA ASÍ
Este café de Sumatra, se llama Orang Utan en honor al orangután de Sumatra. Actualmente este animal se encuentra en peligro de extinción. El cultivo del aceite de palma ha contribuido a la destrucción continua de la selva y los bosques tropicales, hábitat de este animal. Este monocultivo amenaza al orangután de Sumatra y también a los caficultores.
Las cooperativas de pequeños caficultores conocen lo importante que son los bosques tropicales y su biodiversidad como base de su sustento. Tanto el bosque como la selva de Sumatra son pulmones naturales de nuestro planeta. Además constituyen el hábitat de algunas de las especies animales más diversas del planeta. Entre ellas, el tigre de Sumatra, el rinoceronte blanco, el elefante pigmeo y el orangután.
Con este lote Orang Utan se da a conocer de primera mano lo que está ocurriendo en la isla con este animal. Adicionalmente, el 1% de los ingresos de las ventas directas de café verde se destinan a donaciones para la protección del orangután y la conservación de su hábitat. Los pequeños caficultores que participan en este lote tienen sus fincas de café en el distrito de Bener Meriah y Pantan Lues. Muchas fincas colindan con zonas deforestadas recientemente. Para no tener que rendirse al monocultivo de aceite de palma necesitan contar con un negocio financieramente sostenible que les permita proteger sus tierras.
En este distrito la finca promedio es de menos de 1 hectárea. Es notable que cerca del 75% de los productores en el distrito son mujeres y 99.9% de ellos son pequeños agricultores. Una maravilla natural notable que debemos proteger, expandir y garantizar: la supervivencia de un número suficiente de orangutanes.
CAFÉ DE SUMATRA. TRADICIÓN
En el café de Sumatra e Indonesia destacan su particular forma de producción tradicional. También salta a la vista la gran cantidad de pequeños agricultores que intervienen en su cultivo.
La tradición es determinante en la producción del café de Sumatra e Indonesia. Las técnicas ancestrales se transmiten de una generación a otra. Destaca que es cultivado a la sombra y sin productos químicos, con una selección cuidadosa y en armonía con el medio ambiente. Los agricultores creen fervientemente que la producción artesanal y ecológica les permitirá obtener un producto de mayor calidad y renombre.
Origen: Sumatra, Indonesia.
La isla de Sumatra está ubicada en el sureste asiático, en el extremo occidental de Indonesia. Es la mayor de las islas de este país.
El café en Sumatra crece en medio de un clima tropical, extremadamente caluroso y húmedo. Esto, aunado a la altura y al suelo volcánico de sus montañas, transmiten a la planta los nutrientes necesarios para obtener un café con una esencia salvaje y natural.
El Orang Utan se cultiva en la provincia de Aceh, específicamente en la zona de Gayo. Gayo cuenta con una población aproximada de 330.000 personas. En éstas comunidades hay una gran cantidad de pequeños agricultores, con granjas que en promedio tienen menos de media hectárea. Por esta razón los caficultores se organizan en cooperativas.
La cooperativa PT. Ihitiyeri Keti Ara se encuentra en el distrito de Bener Meriah, Gayo. Tiene 380 socios activos, de los cuales 285 son mujeres.
El proceso en el café de Sumatra: Giling Basah
Este café está procesado por un método particular indonesio llamado Giling Basah.
El método consiste en recolectar sólo las cerezas maduras, despulpar con despulpadoras generalmente artesanales y dejar fermentar toda la noche. A la mañana siguiente se lava y se dejar secar uno o dos días.
Luego de este proceso se lleva a la cooperativa, aún con una humedas de entre el 40% y el 50%. Ya en la cooperativa se va a dejar secar en patios hasta dejar entre el 25% y el 35% de humedad.
Posteriormente lo pasan por unas máquinas trilladoras. La fricción quita todo el pergamino y finalmente se seca nuevamente en patios hasta el 11% – 14% de humedad.
Este proceso reduce la acidez e incrementa el cuerpo, resultando el clásico perfil de un buen café de Sumatra y de toda Indonesia.
